Los caracoles Nassarius, son unos pequeños limpiadores muy efectivos. La concha del caracol es una mezcla de blancos, cremas y marrones. Estos pequeños gasterópodos, que rara vez crecen más de 2 cm de largo, son excelentes para el mantenimiento del acuario, ya que se ocupan de los alimentos no consumidos, materia en descomposición, y varios tipos de algas. Estos caracoles se observan con frecuencia en sustratos de arena, arrastrándose a través de la roca viva, y viajando incansables por el cristal en busca de comida.
Nota: La concha de este animal está en constante crecimiento. Necesita calcio de forma continua.
El mantenimiento de los niveles adecuados de calcio de 350 a 450 ppm ayudan al crecimiento de este animal. Si no tenemos algas en el acuario, debemos de complementar su dieta con algas secas.